El albañil que construyó su propia tumba: una historia de terror psicológico

Inicio

David era un joven albañil que trabajaba en una empresa de construcción. Era un chico humilde, trabajador y honesto, que se esforzaba por hacer bien su trabajo y por ayudar a su familia. Un día, su jefe le asignó una obra nueva, que consistía en construir una casa en las afueras de la ciudad, en una zona solitaria y boscosa. David aceptó el encargo, sin saber que esa obra cambiaría su vida para siempre.

Desarrollo

David se trasladó a la zona de la obra, donde le habían preparado una pequeña cabaña para que se alojara mientras durara el trabajo. Allí conoció a los otros albañiles que formaban parte del equipo, y que le parecieron unos tipos extraños y reservados. David intentó hacer amistad con ellos, pero pronto se dio cuenta de que no le caían bien, y que le hacían bromas pesadas y comentarios ofensivos. David se sintió solo y marginado, pero decidió aguantar y concentrarse en su trabajo.

La obra avanzaba lentamente, y David se encargaba de hacer los cimientos, las paredes y el techo de la casa. Sin embargo, a medida que pasaban los días, David empezó a notar cosas raras en la obra. A veces, encontraba sus herramientas rotas o desaparecidas, o veía que alguien había deshecho lo que él había hecho. Otras veces, escuchaba ruidos extraños, como golpes, gritos o risas, que provenían del interior de la casa. David pensó que eran los otros albañiles que le gastaban bromas, pero cuando les preguntaba, ellos lo negaban y lo acusaban de estar loco.

David empezó a sentirse nervioso y asustado, y a tener pesadillas por las noches. En sus sueños, veía la casa terminada, y entraba en ella. Allí se encontraba con una mujer de pelo largo y negro, que lo miraba con unos ojos vacíos y sangrientos. La mujer le decía que esa era su casa, y que él era su invitado. Luego, lo agarraba por el cuello y lo arrastraba hasta el sótano, donde había una tumba vacía, con su nombre grabado en la lápida. La mujer lo metía en la tumba y lo enterraba vivo, mientras se reía con una risa horrible.

David se despertaba sudando y temblando, y se preguntaba qué significaban esos sueños. ¿Serían una advertencia, una premonición, o una alucinación? David no lo sabía, pero cada vez se sentía más angustiado y paranoico. Empezó a sospechar de los otros albañiles, y a pensar que ellos querían matarlo, y que la mujer de sus sueños era su cómplice. David decidió escapar de la obra, y buscar ayuda, pero era demasiado tarde.

Final

Una noche, cuando David estaba durmiendo en su cabaña, los otros albañiles entraron en silencio, y lo ataron y lo amordazaron. Luego, lo sacaron de la cabaña, y lo llevaron a la casa, que ya estaba casi terminada. Allí, lo bajaron al sótano, donde había una tumba vacía, con su nombre grabado en la lápida. Los albañiles lo metieron en la tumba, y empezaron a echarle tierra encima, mientras se reían con una risa horrible. David se dio cuenta de que su sueño se había hecho realidad, y que iba a morir enterrado vivo. Intentó gritar, pero nadie lo escuchó. Lo último que vio fue la cara de la mujer de pelo largo y negro, que lo miraba con unos ojos vacíos y sangrientos, y que le dijo: "Bienvenido a mi casa, David. Eres mi invitado especial".

Resumen del albañil que cabo su propia tumba una historia de terror psicológico

Esta es una historia de terror psicológico sobre un joven albañil que es contratado para construir una casa en una zona solitaria y boscosa, donde empieza a vivir una serie de experiencias extrañas y aterradoras, que lo llevan a la locura y a la muerte. La historia se titula "El albañil que construyó su propia tumba", y pretende generar miedo, suspenso, terror y ganas de seguir leyendo en el lector.

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